La elección de un tipo concreto de papel pintado, es algo que se debe realizar teniendo una base de conocimiento sobre las distintas opciones disponibles. Es preciso reflexionar muy seriamente sobre
la calidad (y precio), sobre sus ventajas, tanto en lo que se refiere
a la colocación como a la resistencia y duración y, especialmente,
sobre el dibujo color. La idea es que dicho papel pintado tenga una larga vida útil y que no tengamos que quitar el papel pintado cada temporada.
La
apariencia del papel nos permite crear en una estancia particular un ambiente diferente: hacerla más cálida o más fría,
darle una apariencia de mayor altura (líneas verticales) o, por el
contrario, más apaisada (dibujos horizontales que predominen),
hacerla más pequeña (con muestras o dibujos muy grandes), etcétera.
En lo que se refiere a la calidad,
conviene distinguir entre tres clases de papeles:
- Papel standard. Es un papel impreso
a máquina con tintas solubles al agua. El inconveniente de estos
papeles es que, si se mojan, pueden emborracharse los dibujos y
motivos. Asimismo, el soporte material de papel que emplean no es de
tan buena calidad como el de las dos otras clases.
- Papel lavable. Está impreso sobre
un soporte de buena calidad, y en su fabricación, o bien se emplean
colores solubles al aceite de linaza, o bien reciben una protección
o film de resinas vinílicas o de siliconas. Este papel puede lavarse
con una esponja humedecida con agua jabonosa o con detergente muy
diluido. Es preciso que ni el jabón ni el detergente contengan
productos cáusticos.
- Papel vinílico. Análogo al
anterior, pero con un tratamiento superficial mucho más eficaz,
hasta el punto de permitir que se pueda lavar con soluciones de agua
y lejía.
Además de estas características, hemos de considerar existen los papeles con relieve los papeles aterciopelados. No podemos dejar de enumerar los
papeles que reciben en su superficie otra clase de materiales, como
pueden, fibras vegetales como la seda, cáñamo, retama, etcétera.
Entre los motivos tradicionales
de decoración de papeles para pared encontramos: las imitaciones de
madera, de tejidos de tela o de encañizado, de piedras y mármoles o de tapizados.